Como nos encanta liarla. Aprovechando que al día siguiente rodábamos una escena con ella, montamos una fiesta improvisada en casa de Julia de Lucía con varios de nuestros actores, cámaras y amigos. Lo que pasa que como en toda buena fiesta nadie se quedó para recoger. Tenemos a Julia muy cabreada y con pocas ganas de salir a rodar. A ver si se nos ocurre algo para que no tenga ni que salir de la cocina...
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